Wednesday, April 05, 2006

¿ARDE PARIS O PARIS ES UNA FIESTA?

Siguen protestas estudiantes en Paris

10:28 AM
30 (AFP) - Los estudiantes franceses que se oponen al nuevo Contrato de Primer Empleo (CPE) bloquearon el jueves el tráfico rodado y ocuparon estaciones de ferrocarril en varias ciudades del país, en una nueva jornada de acciones para hacer ceder al gobierno de Dominique de Villepin.
Estas acciones se producen cuando se espera para última hora de la tarde del jueves una decisión del Consejo Constitucional sobre la validez de la ley que instituye el CPE, origen de la revuelta, que podría ir seguida de un mensaje por televisión del presidente Jacques Chirac.
En Nantes, la gran ciudad del oeste de Francia, cientos de estudiantes bloquearon el jueves por la mañana los principales puentes sobre el río Loira, provocando varias decenas de kilómetros de atascos.
En Marsella (sur), la segunda ciudad del país, unos 200 estudiantes universitarios y liceanos invadieron la vía férrea de la estación principal, impidiendo la partida de todos los trenes.
Anteriormente, los estudiantes bloquearon durante dos horas los diversos accesos a las autopista en torno a la ciudad de Aix en Provence (sur).
En el norte, la circulación en las vías de acceso a Lille y Dunkerque también estaba perturbada por acciones estudiantiles.
La estación de Roanne (centro) fue ocupada por unos 400 liceanos que se instalaron en la vía férrea.
Por otra parte, numerosos institutos estaban bloqueados el jueves por la mañana pese a la orden de liberar el acceso a los centros, incluso con ayuda de la policía, dada el miércoles por el ministro de Educación, Gilles de Robien.
Los sindicatos, las organizaciones de estudiantes y de padres de alumnos advirtieron sobre "cualquier tentativa de utilizar la fuerza" y una asociación de padres incluso acusó al ministro de "echar leña al fuego".
En París, donde unos 40 de los 110 liceos estaban perturbados, sólo se registró una intervención policial para abrir un liceo del Barrio Latino, donde los alumnos que trataban de bloquear el establecimiento fueron dispersados sin incidentes.
Los estudiantes franceses se preparan para la gran batalla


El Parlamento debatirá las modificaciones a la reforma laboral. Crece la oposición al compromiso de Chirac. Se organiza el paro general. Los socialistas elaboran un proyecto. El error de Villepin.
HASTA EL FINAL. La asamblea de estudiantes de Lille ratifica las medidas de fuerza en contra del CPE. REUTER
PARIS.- Los estudiantes franceses celebraron ayer asambleas en la mayoría de las ciudades del país, en las que se reafirmó la decisión de continuar la lucha contra la reforma laboral que refrendará el presidente, Jacques Chirac. Mientras se alzan más voces opositoras al controvertido Contrato de Primer Empleo (CPE), que regirá para los menores de 26 años, los parlamentarios del gobernante partido conservador ajustan el proyecto de ley modificatorio, en los términos propuestos por el mismo Chirac el viernes, y que sólo sirvieron para animar a nuevas protestas.El CPE junior, como llama ahora la prensa al proyecto en marcha, consta de dos artículos: uno establece un período de prueba de un año para los empleados, y otro obliga a los empleadores a ofrecer una razón para despedir a un trabajador. La ley original, que promulgará Chirac, fija el período de prueba en dos años y faculta al empleador para el despido sin causa. Los parlamentarios tratan de que la Asamblea Nacional apruebe la ley esta semana, para cuando se prevén nuevas manifestaciones de protesta en todo el país, además de un paro y movilización general para el martes.Iniciativa simbólicaPor su parte, los socialistas anunciaron que presentarán un proyecto de ley para anular directamente el CPE. Según el líder de esta facción política, Francois Hollande, Chirac creó un embrollo judicial al dar curso a una ley y anunciar en el mismo acto que la modificará. “La única manera de poner fin al conflicto es rechazar el CPE”, dijo Hollande. Sin embargo, el anunciado proyecto sólo tiene carácter simbólico, ya que los conservadores son mayoría en el Parlamento.Según observadores, el primer ministro, Dominique de Villepin, es el principal responsable de la actual crisis, por haber promovido el CPE sin efectuar consulta alguna con los otros partidos o siquiera con los sindicatos. La apertura al diálogo, solicitada durante la semana por el gobierno y reiterada ayer por el propio Chicar, resulta ahora tardía. Las protestas se han multiplicado junto con la cantidad de detenidos y heridos. Además, el conflicto está siendo aprovechado por grupos de inadaptados que provocan desmanes y saqueos, además de agredir a la gente en las manifestaciones.Más de 100 detenidos dejó la turbulenta noche que siguió al discurso de Chirac, el viernes. Las marchas estudiantiles de protesta y los enfrentamientos con la policía se sucedieron en París, Lyon, Nantes, Estrasburgo y Burdeos, entre otras ciudades. (Reuter-DPA-AFP-NA)

Monday, April 03, 2006

DESAFÌO AL ESTABLISHMENT

 INMIGRACIÓN: Desafío al establishment
Alberto Avilés Senés
29 de marzo de 2006

This is only a warning (esta es sólo una advertencia), rezaba una pancarta en la marcha de más de medio millón de inmigrantes que el sábado nos lanzamos a la calle en Los Ángeles, California, a exigir respeto a nuestros derechos. En esta cinco palabras se resumión un nuevo fenómeno que de ahora en adelante marcará el paso de las luchas sociales en Estados Unidos.

Esta manifestación es la mayor movilización de migrantes en la historia de la Unión Americana y la mayor concentración jamás habida en Los Ángeles, superior incluso a las protestas que en 1994 escenificaron unas 150 mil personas oponiéndose a la Propuesta 187, de infame memoria, que pretendía despojar a los inmigrantes y sus hijos de servicios básicos.
La 187 procuraba también convertir en denunciantes obligados a todos los empleados públicos cuando hubiera “sospecha” de que alguien estaba en el país de manera indocumentada. Y si bien fue aprobada en ese año por los electores (25% de ellos latinos), la medida fue desafiada judicialmente y jamás entró en vigor.
Doce años después, en este país está diseminándose un movimiento de reivindicación laboral y de derechos civiles, encabezado y compuesto casi exclusivamente por migrantes, que nace con mucho mayor fuerza de la que mostraron los anteriores —incluyendo las luchas sindicales de Chicago en el siglo XIX, o el pronunciamiento estudiantil (los famosos walkouts) y la Moratoria Chicana en Los Ángeles en los 60—, equiparable sólo al movimiento de los derechos civiles que encabezó el reverendo Martín Luther King también en los 60 .
En las últimas dos semanas, en más de 15 ciudades, literalmente cubriendo todas las regiones del país, han habido marchas de protesta protagonizadas por migrantes que supera todas las marcas históricas de asis-tencia.
Durante la marcha del sábado en Los Ángeles, llena de color y de ingenio en las consignas y pancartas, no hubo un solo arresto y no se registró ningún incidente violento.
Pero no es únicamente el tamaño de las concentraciones lo que define a este movimiento. Los migrantes latinos recientes (aquí todos somos migrantes, excepto los indios nativos), hemos perdido el temor a ganar la calle, y a ello se han sumado factores decisivos como el enérgico apoyo de los medios de comunicación, los clubes y federaciones de oriundos, la Iglesia Católica y políticos como el alcalde de Los Ángeles, Antonio Villaraigosa, quien fue uno de los convocantes a la marcha y orador principal al culminar ésta en las escalinatas de la alcaldía.
En un artículo editorial que publicó la semana pasada The New York Times, el cardenal Roger Mahony, arzobispo de Los Ángeles, advirtió que su arquidiócesis desobedecería cualquier ley que prohibiera prestar asistencia a personas indocumentadas, como propone la iniciativa de ley HR 4437, que fue ya aprobada por la Cámara Baja y aguarda la confirmación o el rechazo del Senado estadounidense a finales de este semana.
Dicha ley, que convierte en criminales no sólo a los inmigrantes indocumentados sino también a toda persona que les dé trabajo o les auxilie de cualquier manera, ha sido el centro de las protestas que han cundido en el país (Chicago, Los Ángeles, Denver, Charlotte, Tucson, Sacramento, Trenton, Washington, D.C., Phoenix, Milwaukee, Cleveland, Atlanta, Kansas City, San Francisco, y contando...).
Si la simple amenaza de que una ley draconiana pudiera promulgarse ha generado todo este clamor, imaginemos qué podría ocurrir en caso de que fuera aprobada.
La otra buena noticia es que en Estados Unidos el establishment sólo reacciona cuando tiene enfrente una fuerza que lo amenaza. Las conquistas laborales hoy vigentes tuvieron su origen en el movimiento sindical de Chicago; la legislación de los derechos civiles fue producto de la enorme presión que ejerció el movimiento del reverendo Martin Luther King, y ahora en las universidades del país estudia un número cada vez mayor de latinos debido al excepcional desafío que representó la Moratoria Chicana.
Sin adelantar vísperas, bien podríamos afirmar que después de andanada tras andanada de los pequeños pero ruidosos sectores racistas de la sociedad, los migrantes latinos de este país empiezan a comprender que su destino no está en manos de quienes los defienden, sino en las suyas propias.
 Alberto Avilés Senés es periodista mexicano radicado en Los Ángeles. 
avilesalberto@msn.com